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Todo o nada en el séptimo partido que enfrentaba a los Philadelphia 76ers contra los Boston Celtics en el TD Garden de Boston. La noticia de Avery Bradley perdiéndose lo que resta de playoff debido a su maltrecho hombre, fue un jarro de agua fría para los chicos de Doc Rivers. Los Sixers por su parte, buscaban dar la sorpresa, más bien la campanada, haciendose un hueco en las finales de conferencia. Aun se llegaría al último cuarto con todo por decidir, pues los Celtics mandaban pero los de Philadelphia no se amilanaban. La situación se complicaría cuando Pierce cometió su sexta falta y su expulsado con 4 minutos aun por jugar. Fue entonces cuando Rajon Rondo demostró que es un jugador del más alto nivel, echándose al equipo sobre los hombros y firmando su noveno triple-doble en playoff acercándose a los más grandes que ha conocido este deporte. Philadelphia sobrevivió hasta el "clutch-time", allí, como ya digo, la figura de Rondo sobresalió de manera imparable. Victoria local por 75-85 para establecer el definitivo 4-3 favorable a Boston que ahora se las verá con los Heat en las finales de la conferencia Este que dará comienzo mañana a las 02:30 (esta noche a la misma hora, empieza la final de Oeste entre San Antonio y Oklahoma).
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