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Solo quedan dos series por finalizar, ambas en la conferencia Este, que a su vez determinaran quienes son los finales de la conferencia. Anoche era el turno del quinto encuentro entre Pacers y Heat, donde era el turno de Miami de obtener una victoria en su feudo para poder volver a jugar un hipotético séptimo partido y además tener la opción a su vez de finalizar la serie en Indiana. El partido comenzó igualado con los locales mandando por seis al término del primer cuarto. La fatalidad llegó más tarde con Danny Granger cayendo sobre LeBron James y lesionándose en su tobillo, pese a que pudo volver al partido, también volvió a recaer. A parte de las lesiones, fue un partido sucio que se puede demostrar con las faltas flagrantes (tipo 1) de Hansbrough sobre Wade o Haslem sobre Hansbrough. Sin irnos muy lejos de este apartado, al final del partido, Dexter Pittman le pegó un violento codazo voluntario a el base de los Pacers Stephenson, y seguro que le cae sanción. El dominio de los Heat se hizo material en la segunda parte donde los de Frank Vogel se vieron incapaces de reaccionar, pues Miami terminó lanzando en un 61% y Indiana lo estaba haciendo en un escaso 33%. LeBron volvió a rozar el triple-doble y los Heat vencieron por 83-115 y se hacen con las riendas de la serie mandando por 3-2.
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