El partido de la jornada duró menos de lo que esperaba, ya que casi al comienzo del partido, Willy Caballero (portero del Málaga) se auto expulso en una jugada absurda. Esta desafortunada acción surgió en el minuto 27 de la primera parte, gracias al intento de salvar un balón divido, Caballero usó la mano para facilitarse el control del balón, pero lo hizo fuera del área y el árbitro lo cazó. Maresca fue intercambiado por Ruben, el portero suplente, para tener un nuevo hombre que se colocara bajo los palos. Pese a todo el partido quedó totalmente desnivelado tras esa fortuita jugada ya que para entonces el Levante ya vencía por 1-0 gracias al gol de Barkero a la salida de un corner, hay que decir que el remate golpeó en un defensor del Málaga imposibilitando la parada del balón. Todo esto se agravaría aún más cuando al sacar la falta que supuso la expulsión de Willy Caballero, Ruben no adivinase a atajar el disparo de Barkero y el rechace lo aprovechó Juanlu para hacer el segundo gol granota. La capacidad de reacción por parte del Málaga se vio totalmente mermada y allá por minuto 40, el equipo local daría matarile al partido en un desbarajuste defensivo del Málaga y un falló garrafal del guardameta del Málaga al no coger el balón a tiempo para fortuna de Koné que fue el más listo de la clase y le robó el balón delante de sus narices para marcar a puerta vacía el tercero y definitivo. En la segunda parte el Levante se limitó a aguantar el 3-0 para así colocarse segundo en la clasificación empatado con el líder, el fútbol club Barcelona, con 17 puntos.
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